Un tramo donde empieza la carrera, y otro donde empieza la aventura
La recta de tribuna es donde se apagan los semáforos y da comienzo la competición. Acelerando, subiendo las pulsaciones, sabiendo que lo que pasará a continuación lo vas a disfrutar al máximo.
El primer tramo del Grand Tour de Cataluña también empieza fuerte, con Barcelona y todos sus encantos como telón de fondo. Y sigue hacia el sur, pasando por lugares icónicos como Montserrat o Sitges, hasta llegar a Tarragona. Una etapa para tomarla con calma, disfrutando cada recta y cada segundo.
Un tramo lleno de historias, y un tramo lleno de historia
Hay tramos llenos de historias, y de historia. Este es uno de ellos. La curva más difícil técnicamente, en subida, con la estampa del Mas Moreneta al fondo.
Un tramo que bien podríamos comparar con el segundo del Grand Tour, el que conduce de Tarragona a Lleida. Un recorrido repleto de carreteras llenas de historias, y monumentos que te llevarán a través de más de mil años de historia.
Un tramo para competir, y un tramo para compartir
Este tramo es perfecto para los amantes de la competición, la adrenalina y la sensación de vivir al máximo cada momento. Un tramo ideal para compartir con los tuyos desde la grada, y ahora también desde tu casa.
El tramo que va de Lleida a la Seu d’Urgell a lo largo del Grand Tour también es perfecto para compartir. Con paisajes de vértigo, los mejores cielos estrellados de Cataluña, los Pirineos… Un tramo que, en sí mismo, ya es un viaje inolvidable.
Un tramo para ganar, y un tramo para perderte
Si te gusta mantener la tensión hasta el final, disfrutar con la incertidumbre de un gran final, apurar la última curva, saber que estás en el momento de la verdad…, si te gusta la emoción hasta el final, este tramo está hecho para ti.
El tramo 5, de Figueres a Barcelona, es el último del Grand Tour de Cataluña. Un recorrido por la Costa Brava que hicieron piratas y bandoleros, y que tú también puedes recorrer. Un tramo que puede parecer el final de tu viaje, pero que, en realidad, es el principio. Porque pase lo que pase, habrás vivido una experiencia que siempre recordarás.
Un tramo para acelerar, y un tramo para detenerse
Llegar a máxima velocidad y reducir marchas para frenar antes de la curva más cerrada del circuito. Este tramo representa el momento en el que el tiempo se detiene por un instante, en el que de repente todo va a cámara lenta.
Entre la Seu d’Urgell y Figueres también hay mil lugares para detenerse: miradores, restaurantes, bosques encantados, volcanes, villas medievales… Si el Grand Tour fuera un circuito, su cuarto tramo sería el lugar adecuado para frenar y repostar.